
El mini elepé que abre la segunda etapa de Los Secretos ("El primer cruce", 1986) está evidentemente muy en deuda con Gram Parsons y con el sonido de los Flying Burrito Brothers. Su secuela (llamada "Continuará", y publicado un año después) debería haber seguido por ese mismo camino, pero una gestación plagada de problemas (una producción tacaña, a pesar del éxito del anterior elepé, o unos arreglos demasiado atentos a las hoy trasnochadas modas de la época) echó a perder el que, en cuanto a las canciones que contiene, es uno de los mejores trabajos de Los Secretos. Compárese, si no, la versión de este "No digas que no" del álbum "Continuará" (con esa voz que parece venir del fondo de un embudo y esa batería sobredimensionada) con la de Los Problemas (limpia, nítida, acústica).
Esta canción, ya digo, es en realidad una de las pocas que mantiene el espíritu del álbum anterior. En realidad debería considerarse una versión bastarda del "Hickory wind" de Gram Parsons, por más que los créditos señalen como autor a Enrique Urquijo. "Hickory wind" fue publicada en "Sweetheart of the rodeo" (The Byrds, 1968), y se dice que la mismísima Emmylou Harris dedicó esta canción a Enrique (que solía también cantarla cuando se encontraba relajado y entre amigos) en el concierto que ella dio en Vitoria el 28 de mayo de 1984.
Versión Los Secretos ("Continuará", 1988)
Versión Los Problemas ("Desde que no nos vemos", 1998)
Por todo el camino de mi barrio a tu barrio,
cómo convencerte venía pensando.
Nunca se recibe sin dar nada a cambio,
yo daría mi vida por dormir en tus brazos.
No digas que no, no soy un extraño,
no puedo volver y estoy tan cansado.
No soy el mejor, eso está muy claro,
no digas que no, estoy en tus manos.
No digas que no, no soy un extraño,
no puedo volver y estoy tan cansado.
No soy el mejor, eso está muy claro
no digas que no, estoy en tus manos.

Hickory Wind, de Gram Parsons ("Sweetheart of the rodeo", The Byrds 1968)
En Carolina del Sur hay muchos pinos que son altos.
Yo recuerdo el roble al que solíamos trepar.
Pero lo que mejor me hace sentir cada vez que comienza
llamándome de vuelta a casa
es el viento de Hickory.
Empecé a hacer de casi todo cuando era todavía muy joven,
a probar todos los lujos y placeres
y todo lo que la vida podía ofrecerme.
Pero ahora, cuando estoy solo,
siempre finjo que estoy empezando a sentir
el viento de Hickory.
Es una forma dura de averiguar que los problemas son reales,
en una ciudad lejos de todo
y con la sensación de que uno está lejos de todo.
Pero lo que mejor me hace sentir cada vez que comienza
llamándome de vuelta a casa
es el viento de Hickory.
Y sigue llamándome de vuelta a casa
el viento de Hickory.
1 comentario:
Me encuentro con esta página por la bendita casualidad de internet, y mira por donde ya decía yo que por algo me tenían que gustar a mi Los Secretos (y su alma Enrique Urquijo). de hecho es el único grupo español que me ha gustado en los últimos 30? años... y ya sé, ya sentía yo esa emoción en sus canciones, ese regusto a que eso era un poco mío aunque no sabía por qué...y eso es la bonita voz, el buen gusto,el sentimiento, la autenticidad (pero como todo el mundo lo asimilaba a la "movida madrileña" plena de petardos musicalmente hablando...), aunque no, y el hecho es que siempre pensé que "no digas que no" era la resurrección de Hickory Wind, y que "ojos de gata"( no hablo de Sabina con todos mis respetos para su bastarda versión) lo es de Drug Store Truck Drivin Man... y por fin se cierra el círculo y me siento feliz de haber encontrado este blog, me daba igual pero me relaja tanto añadir sin complejos a Los Secretos a la lista de Mis Favoritos, las influencias son tan magníficas, es como si nadie hubiera muerto totalmente, ni Gram Parsons, ni Enrique Urquijo, la buena música que los dos amaban y nos hicieron amar a otros nos mantiene unidos de forma indestructible.
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